miércoles, 26 de enero de 2022

Enfrentemos un nuevo ataque sobre las comunidades educativas de la Escuela Media

El Ministerio de Educación de la CABA, bajo la órbita del Jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta y usando como “trampolín” para sus anuncios a la “Expo Empleo Joven”, dio a conocer los detalles de las Prácticas Laborales Obligatorias. Los estudiantes de secundaria comenzarán las clases el 2 de marzo, siendo a partir de este ciclo lectivo, el punto de partida para que los alumnos del último año de ese nivel debieran llevar a cabo las “prácticas laborales obligatorias” en empresas u ONG. La medida alcanzaría a 29.400 jóvenes de 442 establecimientos educativos de gestión pública y privada (Clarín, 24/01/22).

Desde el Ministerio encabezado por Soledad Acuña, presentan a estas "actividades, previstas en el Diseño Curricular, de aproximación al mundo del trabajo y a los estudios superiores". Los estudiantes serían evaluados durante estas “experiencias laborales” que no serán remuneradas y se desarrollarán durante un total de 120 horas cátedra, equivalentes a 80 de reloj. Estas horas no se sumarán a la currícula, sino que serán parte de la carga horaria de las materias de las orientaciones de los últimos años y del Espacio de Definición Institucional (EDI). Lisa y llanamente, un atropello a un movimiento estudiantil que en el pasado, le ha sabido hacer frente a la “Secundaria del Futuro” con las tomas de más de 30 colegios secundarios en la CABA.

Nuevamente, la contrarreforma educativa dirigida a eliminar el dictado de contenidos científicos y universales, por otros, híper particularizados en el “menú a la carta” de las incesantes demandas del mercado, en su búsqueda por sostener la languidecente tasa de ganancia. Esa juventud lanzada al “mundo laboral”, es la misma para la que el Gobierno de Larreta, amparado en la LEN kirchnerista, anunció en su momento, las "Prácticas profesionalizantes" (https://politicaobrera.com/6107-practicas-profesionalizantes-la-reforma-laboral-en-la-educacion)

Hasta diciembre, según confirmaron en el GCBA, se habían registrado 265 empresas y ONG. Sin embargo, estas patronales de diverso pelaje son insuficientes actualmente, ya que se necesitarían 400 para cubrir al total de los 11.250 alumnos de 116 escuelas públicas que desarrollarán las “prácticas”. Por su parte, las escuelas de gestión privada deberán establecer sus propios convenios con empresas y organizaciones. En la CABA hay 326 colegios secundarios privados, con 18.150 alumnos que cursarán 5° año durante 2022 y deberán hacer las “experiencias laborales”.

Por otra parte, se informó que además de las “experiencias laborales”, los alumnos tendrán otras 30 horas cátedra anuales en las que aprenderán Educación Financiera y Habilidades Blandas (Clarín, 24/01/22). En el presente contexto de crisis humanitaria y crisis capitalista, la perspectiva para la juventud, lejos del acceso al consumo, al ahorro, ni a la posibilidad de planificar un porvenir personal, ni familiar, es la de un régimen político cuyo objetivo es atarla de pies y manos a la precarización permanente, como mano de obra barata que reemplace a los trabajadores que siguen cayendo bajo el contagio de la pandemia. Lejos de formar el pensamiento crítico, el vínculo entre la enseñanza y el aprendizaje fetichizado como mercancía (https://politicaobrera.com/6259-larreta-quiere-meter-el-bitcoin-en-los-colegios-de-la-mano-de-balanz-mercado-libre-y-uala)

La propuesta oficial es que los alumnos vayan rotando por diferentes áreas y propuestas dentro de una misma organización, distribuidos en grupos de entre 3 y 6 estudiantes. Las “organizaciones” deberán tener espacios físicos para que se puedan realizar estas experiencias presenciales. Además, tendrán que tener las habilitaciones correspondientes para su actividad para que los alumnos puedan contar con un seguro que será gestionado por el Ministerio de Educación porteño. Para asistir a las actividades, los alumnos deberían trasladarse por su cuenta, ya que cuentan con boleto estudiantil (Ídem, Clarín).

Todo esto, en un 2022 en el que los gobiernos nacionales y porteños pretenderán continuar con el aperturismo y la presencialidad criminal, en un contexto en el que la persistencia del Covid-19 y la variante ómicron, generan contagios masivos, como lo demuestran el promedio de 100 mil contagios diarios y un ausentismo laboral que ronda el 20%. El sacrificio de la salud y el riesgo letal sobre la vida de estudiantes y trabajadores.

Por su parte, la conducción Celeste de UTE tilda en uno de sus comunicados de “marketinero” el anuncio, al mismo tiempo que no llama a ninguna asamblea, plenario, ni acción alguna para enfrentarlo.

Es imperiosa la necesidad de convocar a una asamblea abierta de toda la docencia, articulada con los estudiantes y las familias, una vez comenzadas las clases, preparando el terreno para la deliberación y la toma de resoluciones mediante asambleas por escuelas y distritos, en el norte de la huelga general educativa.