La campaña electoral que se desarrolla desde hace tres meses transcurre de espaldas a una crisis política terminal y a espaldas de un aumento enorme de la pobreza de los trabajadores.
Tanto el FdT como JxC votarán después de las elecciones el acuerdo con el FMI que traería como consecuencia la reforma laboral y previsional, un ataque brutal contra las masas asalariadas y pauperizadas.
Ante ese escenario electoral que tendrá el 14 de noviembre su instancia general, para renovar al Parlamento, la dirección de Política Obrera (organización en la que milito) y una mayoría de la militancia, llama a votar a POLÍTICA OBRERA, el próximo domingo 14, y por los partidos y frentes de izquierda, en los distritos, muy importantes, donde no hemos superado las Paso. Pueden encontrar, a continuación, la declaración publicada en la web de Política Obrera.
Mi posición personal, que representa a la posición minoritaria de la Tendencia ante el voto en el 14/11, es la contraria a la que acabo de describir. Ninguno de los partidos en presencia ofrece una salida, sea al impasse político, ni en cuanto a la catástrofe social. Ni siquiera la Izquierda (FIT-U y AyL, en CABA). No hay que votar a ninguno.
El voto, desde mi punto de vista, debe ser programático ¿Qué significa eso?
En el norte de lucha, por un salario acorde a la canasta familiar, una jubilación acorde a la canasta de la tercera edad, continuar impulsado una campaña a favor de un CONGRESO OBRERO de carácter político. En tanto la clase obrera no ocupe el escenario político como fuerza independiente del capital y de la burocracia de los sindicatos, no podrá postularse, por medio de una lucha adecuada, como la alternativa del conjunto de la población trabajadora.
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